Descubre cómo elegir y combinar tipografías inteligentemente
Ya no tendrás que sufrir, con estos consejos lograrás escoger y combinar tipografías para generar diseños espectaculares.
Cómo elegir y combinar tipografías en los diseños
Escoger la tipografía ideal para nuestros proyectos no es una tarea fácil, requiere más que creatividad para lograr un buen resultado. Por esa razón, en este apartado te brindaremos algunos consejos para que aprendas a combinar diferentes tipografías en tus diseños.
Cuando se trata de publicidad impresa, elegir las tipografías con inteligencia es clave, de lo contrario podríamos arruinar el trabajo que hemos tardado horas en hacer. Si bien no existen fórmulas mágicas, hay varios puntos que debemos tomar en consideración:
No busques la tipografía perfecta
Tenemos que empezar aclarando una cosa: las tipografías perfectas no existen; por lo tanto, intentar buscarlas sería un caso perdido. Incluso el diseñador más experimentado tiene sesgos personales, así que cualquiera de sus selecciones podría ser la ideal.
Lo anterior no quiere decir que no hayan tipografías correctas, por supuesto que existen mejores opciones que otras. Más bien, se refiere a que no hay un estándar generalizado que nos indique cuál es la fuente correcta que deberíamos usar en determinado diseño.
Si te encuentras en un dilema y no sabes con cuál familia tipográfica deberías trabajar, entonces tu mejor opción es utilizar un método de prueba y descarte. No tengas miedo y juega con diferentes combinaciones hasta que obtengas el resultado que buscas.
Conoce a tu público objetivo
Como se mencionó en el apartado anterior, los sesgos personales existen; sin embargo, no son justificación para dejar de lado al público objetivo. Olvidar para quiénes estamos trabajando es un error muy común que debemos evitar a toda costa.
Conocer al target es de suma importancia si quieres escoger las mejores tipografías para tu proyecto. Por ejemplo, utilizar una familia de
Fantasy para el manual impreso de una compañía, quizá no sea lo mejor idea, en cambio podrías optar por las fuentes con
Serif.
Busca el contraste
Es importante que al planear nuestros diseños utilicemos tipografías que posean diferentes variaciones: negrita, cursiva o itálicas, demi, medium, condensed, light, extralight, entre otras. De esa forma lograremos darle mayor variedad y dinamismo a la composición.
Experimentar con diferentes niveles visuales en los textos hará que el producto final sea más interesante. Si te enfocas en crear
contraste mediante la tipografía, podrás generar productos finales que resulten más atractivos y divertidos para los consumidores.
Pon un límite en la cantidad de fuentes
Es verdad que darle variedad a las tipografías puede ayudar a generar diseños llenos de vivacidad; sin embargo, el exceso podría arruinar totalmente nuestra propuesta. Para crear buenas composiciones es indispensable que sepamos dónde parar.
Si combinamos muchos tipos de letras, nos arriesgaremos a producir piezas demasiado cargadas. Los clientes podrían perderse en los detalles y no prestarían atención al mensaje que buscamos transmitir. Interrumpir la legibilidad del diseño es un error de principiantes.
En cuanto al uso mixto de tipografías, menos es más. No es recomendable que utilices más de
dos fuentes en el mismo trabajo. No es una regla obligatoria, todo dependerá del objetivo final, debido a que la limpieza transmite profesionalidad
Privilegia la legibilidad
En algunas ocasiones será necesario que sacrifiquemos un poco la creatividad para darle prioridad a la legibilidad. Después de todo, de nada sirve tener un trabajo visualmente hermoso si el público no podrá entender con claridad qué es lo que dice.
Las tipografías manuscritas o decorativas pueden ser un dolor de cabeza al intentar descifrarlas. Es importante que si planeamos usarlas, las limitemos a títulos pequeños o palabras específicas, son muy bonitas, aunque ilegibles en textos largos.
Cuando estés seleccionando las tipografías es importante que escojas aquellas familias que sean fácilmente legibles, especialmente cuando se trate de títulos o cuerpos de texto muy largos. Busca aquellas fuentes que brinden claridad e ingenio al mismo tiempo.
Este aspecto es muy importante también en los
textos de publicidad impresa, ya que el lector necesita ser atraído por el mensaje que queremos transmitir.
Organiza jerárquicamente
Cuando queremos presentar una estructura bien organizada, la mejor opción que tenemos es representarla de manera visual. Así pues, si queremos establecer jerarquías en nuestros diseños, las tipografías son uno de los muchos recursos que tenemos disponibles.
Para lograrlo, debemos destacar las palabras que tienen mayor importancia al momento de transmitir un mensaje. Uno de los ejemplos más comunes es cuando destacamos los títulos y subtítulos del resto del texto aumentando el tamaño de la fuente o cambiando el color.
Si buscas crear un orden por importancia, no solo tienes la opción del tamaño, también puedes jugar con el peso de las letras utilizando las variantes tipográficas de una familia.
También puedes crear una separación visual entre los elementos ajustando el interlineado.
En resumen, combinar tipografías puede ser difícil si nos basamos únicamente en el lado creativo y los criterios personales. Si buscamos composiciones armoniosas y llamativas, es importante que contemplemos al público que le estamos hablando.
También es fundamental que no nos olvidemos de los elementos estructurales como el contraste, la cantidad de fuentes, la legibilidad del texto y la organización jerárquica de los elementos que componen al diseño final.
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