Tipos de etiquetas y su utilidad en el mundo de las ventas
¿Sabes cuáles son los diferentes tipos de etiquetas y cuál es su importancia en el mundo de las ventas? Muy seguramente habrá dos o muchos detalles que desconozcas. Quédate con nosotros y conoce todo lo que necesitas.

Las etiquetas juegan un papel importante dentro del proceso de ventas para cualquier producto. No sólo ayudan a identificar la función de la mercancía, también nos proveen motivos para apoderarnos de la oferta en cuestión.
¿Quieres conocer más acerca de las etiquetas y cuál es su utilidad al momento de distribuir un producto en el mercado? ¡No indagues más! En este artículo te presentamos la información técnica que precisas para capacitarte en el área.
El origen de las etiquetas
Si bien muchas estrategias de marketing y ventas se originaron en fechas recientes, este no es el caso de las etiquetas. Y es que, aunque no contamos con datos precisos, se piensa que las etiquetas son tan antiguas como los envases mismos.
Los griegos y romanos empleaban inscripciones en vasijas para ungüentos y aceites, y en recipientes para medicamentos, respectivamente. Asimismo, desde el siglo XVI existía la costumbre de colgar etiquetas de plata o marfil alrededor de las botellas de vino.
Aprende más sobre la evolución de los tipos de etiquetas y elige la mejor para tu producto.
La importancia de las etiquetas en el proceso de venta
Puede ser una realidad tan implícita que apenas reflexionamos sobre ella, pero lo cierto es que sin etiqueta, no hay venta. Las etiquetas son el primer contacto que la clientela tiene con el producto. A partir de ella se forma un imaginario y el consumidor toma una decisión.
Es decir, ninguna persona tendrá confianza en un producto a menos que éste cuente con una etiqueta que lo presente. Sea por los datos que mencionamos antes o por justa necesidad de presentación, la etiqueta fungirá como motivación final para comprar.
Tipos de etiquetas sin adhesivo
Previo a los años 80, el tipo de etiquetas hegemónicas eran aquellas de papel con características adhesivas. De hecho, a principios de los 70, el 90% del mercado era acaparado por soluciones de goma húmeda y papel engomado.
Posteriormente,
se idearon etiquetas elaboradas a base de sustratos que no requerían material adhesivo adicional. Esto, debido a que los resultados de fusión o adherencia se producían por medio de presión, calor o humedad, por ejemplo.
A estas opciones sin adhesivo pueden sumárseles características que las determinan en diferentes tipos.
Etiquetas engomadas
Las etiquetas engomadas son las primeras en este grupo de soluciones sin adhesivo. Son fácilmente identificables por su gran calidad y sus características particulares. Por ejemplo, la realización de pequeños detalles en relieve de alta definición o transparencias.
En este caso,
la máquina de etiquetado activa el adhesivo a través del agua, haciendo uso de una esponja. Y aunque los resultados son excepcionales, cabe aclarar que no es recomendable para empresas pequeñas dado los altos costos de mantenimiento.
Aquí te dejamos las etiquetas engomadas más comunes:
Convencionales:
Las etiquetas engomadas convencionales cuentan con ventajas principalmente relacionadas a la duración y la resistencia en entornos variados. Dicho así, su material engomado soporta temperaturas extremas, humedad e, incluso, la misma agua.
De igual modo, este método de aplicación es atractivo en sentido de diversidad de materiales. Los sustratos que se emplean son diversos y posibilitan diseños con relieves en pro del diseño y el marketing.
De película, precortadas y apiladas:
La decreciente producción de botellas de vidrio, hizo necesarios procesos que permitieran una compatibilidad mayor entre la etiqueta y el plástico. Como resultado, se inició el etiquetado a través de la manipulación de películas, en una gran variedad de materiales.
La ventaja de las etiquetas de película, precortadas y apiladas era su automatización. Dado que debían aplicarse a grandes volúmenes (botellas y envases plásticos), su modalidad predeterminada y en fila agilizaban el proceso considerablemente.
De envoltura, de película:
A la par, las etiquetas de envoltura son ampliamente usadas en el campo del etiquetado de botellas.
Dependiendo de la correspondencia entre materiales, la película puede amoldarse perfectamente al cuerpo del producto.
Algunas de las formas de impresión para esta etiqueta pueden ser por flexografía o retrograbado. La impresión para efectos promocionales o informativos se realizaría al reverso de la película empleada.
Etiquetas en molde
Las etiquetas en molde son altamente elegibles en medida de que, una vez colocadas, se vuelven indistinguibles del producto. No dejan ningún borde a la vista, por lo que resulta difícil notar que hubo un proceso de etiquetado.
Durante él, las etiquetas precisan de pre-impresiones en material sintético, película o papel. Éstas son colocadas después en moldes adaptados a cada diseño según sus características. Más adelante se les somete, bien, al soplado, inyección o termoformado.
En molde por soplado:
Este subproceso puede realizarse con ayuda de trabajo robótico o de manera manual. La etiqueta es colocada dentro de la cavidad del molde y fijada a la pared a través de estática o vacío. Luego se cierra el molde con la preforma dentro del mismo.
Rápidamente y con la temperatura apropiada, la preforma cilíndrica aún en estado de fluidez adquiere la forma del molde. Así, la etiqueta termina adhiriéndose a este sin dejar ningún indicio de incompatibilidad.
Este sistema suele utilizarse en botellas de polietileno y de polipropileno.
En molde por inyección:
A diferencia del proceso por soplado, los resultados del molde por inyección no dependen ni de la temperatura ni de la presión. La calidad de adhesión dependerá del material añadido a la cavidad donde ya ha de encontrarse la etiqueta: el plástico inyectado.
Esto significa que el producto adquirirá forma a la par en que integra a su composición la etiqueta. Es por dichas condiciones de fusión que este sistema tiende a utilizarse para productos particularmente rígidos.
Termoformadas:
De manera similar, las etiquetas elaboradas por termoformado parten de moldar un material hasta fusionar la etiqueta. La diferencia, aquí, es el uso de una lámina termoplástica. A ella se le aplicará presión positiva de aire, al vacío o acoplamiento de moldes macho y hembra.
Recientemente es común este método de aplicación con los productos que utilizan materiales sintéticos en sus etiquetas. Un ejemplo de esto pueden ser las cremas de untar o pomadas.
Etiquetas de manga
Las etiquetas de manga (o etiquetas sleeve, por su nombre en inglés) son una manera de vestir total o parcialmente un producto. Su aplicación más importante está en el sello de seguridad, necesario en botellas de medicamentos y otros productos alimenticios.
Asimismo, estas etiquetas pueden fijarse en el recipiente por medio del estiramiento o contracción del material elástico con que fueron hechas.
Autoencogibles:
Estas etiquetas se ajustan a envases de formas cilíndricas, cónicas o muy irregulares. La aplicación de calor que se ejerce a las mismas provoca que se compriman en torno al producto. Tal proceso facilita una adhesión excelente, independientemente de la forma.
Actualmente, su uso se ha generalizado para la decoración innovadora de envases de bebidas, especialmente las de índole infantil. También se utilizan con frecuencia en productos domésticos, de tocador, alimenticios, farmacéuticos, etc.
Estirables:
Contrario al proceso anterior, las mangas estirables o dilatables dependen de un corte del tubo de película a profundidad determinada. Después, este tubo se abre para deslizarse sobre el envase y, finalmente, se encoge para amoldarse al mismo.
Esta tecnología provee ventajas especialmente para los envases PET, debido a que la manga flexible compensa la expansión del material. También es recomendable para productos refrigerados que cambian de forma tras, por ejemplo, el proceso de llenado.
Tipos de etiquetas con adhesivo previo
Ahora bien, como habíamos mencionado, las etiquetas pueden integrarse al producto con o sin adhesivo. Las etiquetas adhesivas son aquellas que, por lo general, pueden prescindir de procesos más complejos de fusión y moldeado.
Lo que la etiqueta requiere para unirse a la mercancía, se facilita por sus características. Sea que la etiqueta contenga pegamento o que el grado de pegajosidad sea alto, las etiquetas con adhesivo facilitan el proceso.
Etiquetas autoadhesivas
El mejor ejemplo de lo anterior son las etiquetas autoadhesivas. Su proceso es simple dado que son sensibles a la presión incluso en condiciones de temperatura ambiente. Por esto es viable, incluso, realizar el proceso de forma manual.
Además, éstas
pueden aplicarse a una diversidad amplia de materiales. Podemos encontrar etiquetas autoadhesivas en envases de papel, plástico, vidrio o madera; todo cuanto requiera de un etiquetado versátil y rápido.
Permanentes:
En general, las etiquetas permanentes funcionan de manera inmediata tras haberse pegado a la superficie. Tras un periodo de asentamiento, terminan de unirse apropiadamente. Con esto, de removerse después, es probable que la fibra del mismo producto se rasgue.
Debido a sus características, resulta fácil que el personal y clientes identifiquen cualquier manipulación no autorizada del producto.
Removibles:
Caso distinto al anterior, las etiquetas adhesivas removibles cuentan con niveles de pegajosidad bajos, lo que propicia el desprendimiento. Esto es a propósito, con la finalidad de que los productos no se dañen en caso de necesitar retirar la etiqueta.
Con esto en mente, las etiquetas son diseñadas para poder removerse incluso después de un largo periodo de tiempo. Suelen ser fabricadas con caucho natural o polímeros acrílicos.
Sin soporte desprendible:
El soporte desprendible o “liner” es, básicamente, el papel o residuo del que es separado cualquier etiqueta autoadhesiva. Las etiquetas sin liners constituyen aquellas soluciones que son sumamente sensibles a la presión, por lo que no requieren de soportes.
Éstas pueden elaborarse a base de polipropileno fino siliconado, significativamente más delgado que un autoadhesivo convencional. Además, son ideales para la cuestión sostenible, puesto que, reciclar los soportes desprendibles, suele ser complicado.
Etiquetas termosensibles
Como su nombre indica, las etiquetas termosensibles son aquellas que dependen de la temperatura para que el adhesivo se active apropiadamente. El calor o el frío, dependiendo del caso, propician la condensación suficiente para que la etiqueta se fije al producto.
Los parámetros que deben considerarse al usarlas son, desde luego, la temperatura y el espesor de la película adhesiva. La temperatura porque se encarga de regular la viscosidad, y el espesor porque afecta la velocidad de asentado y la pegajosidad.
De acción retardada:
Este tipo de autoadhesivos continúa pegajoso por sí mismo tras haber sido retirado de la fuente de calor o frío. Este método suele utilizarse, por ejemplo, en productos de por sí sensibles al calor.
Instantáneas:
Muy por el contrario, las etiquetas termosensibles de acción inmediata precisan de un sistema de preparación y aplicación veloz. Para obtener resultados óptimos, la etiqueta debe ser colocada en el producto apenas sea retirada de la fuente térmica.
Etiquetas con papel engomado
La cualidad principal de estas etiquetas la encontramos en su material. Y es que el papel engomado se logra al recubrir el lado inferior de papel con PVA. La cara con recubrimiento debe humedecerse o mojarse para activar la goma, volviéndola así pegajosa.
El modo más común de colocar estas etiquetas es manualmente. Las etiquetas de envoltura de bolsas plásticas para desechos domésticos, es un ejemplo poco común de lo contrario. En este caso particular, se utilizan dispensadores de cinta engomada.
Desde el ojo externo, las etiquetas podrán parecer un asunto de poca ciencia. Sin embargo, cuando conoces la sofisticación en cuanto a tecnología y materiales, es sencillo comprender su relevancia en el mundo comercial.
¿Te resultó útil esta información? ¡Ábrete paso en el mundo de las ventas y la
impresión de etiquetas sin perder de vista los detalles aparentemente más pequeños!
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