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Tanto la impresión digital como la impresión flexográfica ocupan un lugar importante para el etiquetado de productos. En las imprentas resulta muy eficiente alternar métodos, pero ¿podrían existir aplicaciones de etiquetado que combinen lo mejor de ambas técnicas?
A continuación te comentaremos acerca de las ventajas de la impresión flexográfica y digital, así como sus nuevas aplicaciones en la
industria de las etiquetas. También reflexionaremos sobre el futuro de la producción de etiquetas y sus aplicaciones.
La impresión flexográfica (flexografía digital) es la sucesora de la impresión tipográfica tradicional. Con ella se puede trabajar sobre una amplia gama de bases tales como: plástico, cartón, papel y tela; su nombre lo dice, sirve para imprimir sobre cualquier material flexible.
Funciona mediante prensas que tienen placas de impresión de fotopolímero, las cuales envuelven a cilindros rotatorios. Las placas con tinta giran a gran velocidad para transferir la imagen al material que queremos flexografiar.
Durante el proceso se utilizan tintas semilíquidas de secado rápido, las cuales se pueden adherir a materiales absorbentes y no absorbentes. Gracias a estas características, la flexografía es excelente para producir tiradas largas y grandes en lapsos cortos.
Debido a su particular mecanismo es posible controlar de una sola pasada la impresión, troquelado y laminado. La velocidad de trabajo es rápida y se tiene acceso a consumibles de bajo costo, por lo cual es ideal para la producción en masa.
Gracias a los servicios de impresión digital es posible reproducir una gran cantidad de imágenes en diferentes formatos. Esta técnica revolucionó el mundo de la imprenta y, en el caso de los etiquetados, llegó para hacerle competencia a los métodos tradicionales.
Se trata de un procedimiento en el cual se lleva a cabo la reproducción de imágenes digitales de manera directa sobre un soporte específico. El rango de los materiales para las bases es muy amplio, por lo cual se puede imprimir sobre papel, plásticos, textiles e imanes.
Una de las
ventajas de esta técnica es que permite la generación de acabados muy variados, dando mayor libertad y creatividad al personalizar los diseños. Esto se debe a que es posible el uso de diferentes tipos de tintas: desde las tradicionales hasta en altorelieve.
A diferencia de los métodos tradicionales, la impresión digital no requiere tiempo de configuración antes de imprimir, lo cual la hace una técnica ideal para elaborar etiquetados de tamaño mediano o pequeño.
Tiene una velocidad inferior con respecto a la impresión flexográfica, por eso no es recomendada para la producción en masa o de pedidos considerablemente grandes; sin embargo, permite la realización de diseños más creativos a costos bajos.
Sea cual sea la opción que prefieras, tanto la impresión flexográfica como la digital te traerán grandes beneficios para la elaboración de etiquetados. A diferencia de los métodos tradicionales, te será posible darle paso a la creatividad y diseñar productos más atractivos.
Ingresar al mercado cada vez es más difícil debido a las tendencias que buscan la inmediatez, al mismo tiempo exigen calidad y diseños novedosos. Esta combinación parece no favorable para las industrias ya que resulta poco práctico y caro.
No obstante, gracias a la velocidad de las prensas digitales y a las constantes mejoras en la calidad de la impresión, ahora es posible encontrar un equilibrio entre las demandas de los consumidores y los sistemas de producción de las empresas.
Puedes optar por sistemas de impresión digitales para etiquetas si tienes un diseño gráfico muy complejo, deseas imprimir muchas unidades iguales con números de serie diferentes o quieres
personalizar las etiquetas de tu producto para una promoción específica.
La digitalización de las técnicas de impresión entre las empresas es cada vez más común ya que, pese a que no es factible para tirajes pequeños, permite gran versatilidad al momento de imprimir etiquetas de diferentes tamaños o seriales en cada unidad producida.
La impresión flexográfica digital continuará ampliando su mercado a expensas de otros métodos de impresión. Se prevé que en un futuro no muy lejano la impresión digital desbancará las formas tradicionales y generará nuevas aplicaciones de etiquetado.
Actualmente tanto la flexografía como la impresión digital se utilizan de manera rotativa acorde a las necesidades del cliente; sin embargo, esperamos que en un futuro los métodos mixtos ya no sean necesarios y se pueda fusionar lo mejor de ambas formas.
Esperamos que surjan nuevas formas de etiquetados permitan realizar aplicaciones que ahora solo son posibles mediante métodos convencionales. Además, presagiamos que las nuevas tecnologías suplantarán a las actuales haciendo más rentables los procesos.
La versatilidad de las impresoras digitales se combinará con la agilidad de la impresión flexográfica, creando un sistema con el cual se puedan producir etiquetados en tirajes grandes, pero con diseños complejos y de alta calidad.
La digitalización de los sistemas de impresión para realizar etiquetados ha facilitado la producción de bienes. Tanto la impresa digital como la flexográfica te darán ventajas dependiendo del tipo de diseño que estés interesado en realizar.
Las demandas de los nuevos consumidores nos orilló a buscar nuevas formas de generar productos de manera eficiente y claramente esto continuará en el futuro. Si estás interesado, con nosotros podrá conocer más sobre la impresión digital.
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